BEBE AL AGUA:Primera experiencia de natación
Por :Nathalia Bentz
Full Time Madre
Que hermoso momento me permitieron vivir recientemente Irving Espaillat y Ninoshka Rondón, una pareja muy querida, dedicada desde hace unos buenos años ya, a mejorar la vida de nuestros niños desde su centro Kids Fitness.
Estuve junto a Pascal en su primera sumersión fuera de la tina (porque no sé si son como yo, pero quiero dividirme en 10 para vivir todas las primeras cosas de mis hijos..TODAS!), en esta ocasión su primera CLASE DE NATACIÓN para bebés.
Desde que llegué nos recibieron muy amablemente y nos explicaron muy detalladamente en qué consistía el proceso que viviríamos, así que el monstruo que había creado en mi cabeza acerca del agua me lo fueron achicando auditivamente.
Una vez cerca de la piscina, que dicho sea de paso estaba cristalina y climatizada (dos excusas de arrepentimiento menos), se me apretó el corazón cuando me pidieron que entregara al niño,
-¿estaba lista?-
-¿estaba listo?-
No lo sé, pero lo ví con su pañal especial puesto y su lindo traje de baño de pecesitos, y no me quedó de otra...entregué mi bebé de 9 meses al ¨experto¨ (creo que 34 años en enseñanza lo hace merecedor del título) y no obstante, me presigné.
No quiero extenderme contándoles lo que significó comprobar la hermosa oportunidad que le brindé a mi hijo (para eso el video), si bien lloró al encontrarse en un medio y unas manos extrañas, lo cierto es que disfrutó su encuentro con el agua, con ese mundo que quizás, quisiera pensar, le recordó su estancia por 9 meses dentro de una chica que se desvive y sueña con acompañarlo en sus PRIMEROS todos.
Full Time Madre
Que hermoso momento me permitieron vivir recientemente Irving Espaillat y Ninoshka Rondón, una pareja muy querida, dedicada desde hace unos buenos años ya, a mejorar la vida de nuestros niños desde su centro Kids Fitness.
Estuve junto a Pascal en su primera sumersión fuera de la tina (porque no sé si son como yo, pero quiero dividirme en 10 para vivir todas las primeras cosas de mis hijos..TODAS!), en esta ocasión su primera CLASE DE NATACIÓN para bebés.
Desde que llegué nos recibieron muy amablemente y nos explicaron muy detalladamente en qué consistía el proceso que viviríamos, así que el monstruo que había creado en mi cabeza acerca del agua me lo fueron achicando auditivamente.
Una vez cerca de la piscina, que dicho sea de paso estaba cristalina y climatizada (dos excusas de arrepentimiento menos), se me apretó el corazón cuando me pidieron que entregara al niño,
-¿estaba lista?-
-¿estaba listo?-
No lo sé, pero lo ví con su pañal especial puesto y su lindo traje de baño de pecesitos, y no me quedó de otra...entregué mi bebé de 9 meses al ¨experto¨ (creo que 34 años en enseñanza lo hace merecedor del título) y no obstante, me presigné.
No quiero extenderme contándoles lo que significó comprobar la hermosa oportunidad que le brindé a mi hijo (para eso el video), si bien lloró al encontrarse en un medio y unas manos extrañas, lo cierto es que disfrutó su encuentro con el agua, con ese mundo que quizás, quisiera pensar, le recordó su estancia por 9 meses dentro de una chica que se desvive y sueña con acompañarlo en sus PRIMEROS todos.
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